A puro golpe de albahaca
mi copla se enardecía,
lo defiende al carnaval
como si fuera su vida. bis
Anda como un diablo suelto
en el patio de su carpa,
desvelado, empedernido,
resero de las bagualas. bis
No se callen los cantores,
no se duerman musiqueros,
que esta zamba tiene amores
de los verdaderos,
que esta zamba tiene amores
con el último carpero.
El martes de carnaval
por la noche ya marchita,
entra en la carpa la sombra
se una vieja mascarita. bis
Es cuando Juan Salvatierra
se mira en su salamanca,
mientras convida gozoso
el vino de la nostalgia. bis
No se callen los cantores,
no se duerman musiqueros,
que esta zamba tiene amores
de los verdaderos,
que esta zamba tiene amores
con el último carpero.